¿Engorda el jamón serrano o el ibérico?
Si estás a dieta o vas a comenzar una, seguro que te has planteado en alguna ocasión si el jamón engorda o cuál es el que tiene menos calorías: el serrano, el ibérico o el jamón de York. En este artículo te desmontamos algunos falsos mitos relacionados con este tema y te damos algunos consejos para que puedas incluir el jamón en tu alimentación de forma saludable.
¿El jamón serrano engorda? ¿Y el ibérico?
El jamón serrano es uno de los productos más habituales en nuestra cesta de la compra y suele ser un alimento muy recurrente para bocadillos, tapas y picoteos rápidos. De hecho, una de las preguntas que más se repiten en Internet es si el jamón serrano engorda por la noche o qué jamón puedo comer si estoy a dieta. Estas cuestiones reflejan el desconocimiento general sobre los beneficios de productos como el jamón serrano o el jamón ibérico. Por eso, queremos ayudarte a despejar todas las dudas que tengas para que puedas disfrutar de nuestro jamón ibérico de bellota Dehesa Barón de Ley sin remordimientos.
Calorías del jamón serrano, ibérico y york
El jamón serrano tiene unas 200 calorías por cada 100 g, mientras que el jamón ibérico tiene sobre 250 kcal. Sin embargo, esto no quiere decir que estas calorías sean de mejor calidad. Hay que tener en cuenta el valor nutricional de cada producto.
Por un lado, el jamón serrano tiene más sal y unos 13 g de grasa. El jamón ibérico de bellota como el nuestro te aportará unos 20 g de grasa, pero en más de un 60% se trata de ácido oleico, beneficioso para nuestra salud. Además, el jamón ibérico es muy rico en proteínas de alta calidad, en hierro y en triptófano.
En el caso del jamón york su aporte calórico es de unas 100 kcal por 100 g, pero aporta altas cantidades de sal y grasas saturadas. Es un producto ultraprocesado que, en la mayoría de los casos, lleva féculas, aditivos y potenciadores de sabor entre sus ingredientes. Por lo tanto, aunque parece el más sano, debes fijarte mucho en sus ingredientes y en su valor nutricional cuando vayas a comprarlo.
¿Podemos comer jamón si estamos a dieta?
Entonces, ¿podemos comer jamón si estamos a dieta? La respuesta que encontrarás en cualquier consulta nutricional es que sí, pero debes consumirlo con moderación, dentro de una dieta equilibrada. Es decir, el problema no es que tomes un par de lonchas de jamón en tu cena o en un desayuno. Lo que deberás controlar es el tipo de calorías y la cantidad que aportan al total diario en comparación con el gasto energético que hagas. Y en este sentido, como te hemos demostrado, el jamón ibérico de bellota es la alternativa más sana y nutritiva.
¡Ah! Y da igual si tomas un par de lonchas de jamón por la noche o por la mañana, sus calorías son las mismas a cualquier hora del día.
Cómo incorporar el jamón a tu dieta
Los expertos en nutrición y la OMS aconsejan no superar el consumo de 50 g diarios de carnes procesadas como pueden ser el jamón serrano, el ibérico o el de York, así como otros embutidos. Si estás siguiendo una dieta de adelgazamiento, lo ideal es que no excedas el consumo en 30 g por día, un par de lonchas, para rebajar el aporte de grasas. Con estas cantidades puedes perfectamente añadir 2 lonchas de jamón ibérico a tu tostada de pan integral y tomate por las mañanas o a una cena con verduras salteadas y huevo. Recuerda que siempre será más saludable el jamón ibérico de bellota que el serrano o el de York.
Aquí tienes otro artículo en el que también hablamos de las propiedades del lomo ibérico, otro producto saludable que puedes incorporar a tu dieta para adelgazar con moderación.